domingo, 19 de abril de 2020

Zamuro cuidando alpiste por Instagram @sajidb47



Por Saúl Jiménez Beiza


Desde cuando tengo uso de razón he oído que en Venezuela la corrupción es un elemento clave en la administración pública donde los funcionarios de alto rango “se pagaban y se daban el vuelto”, es decir que administraban y tienen acceso a los bienes públicos y ellos lo movían a su antojo, esa situación fue conllevando a que cada vez se buscaban mecanismos que permitieran el control de los recursos públicos y que se evitara la corrupción, Eleazar López Contreras hizo la propuesta de la creación de la Contraloría General de la República y fue en 1938 se promulga la Ley Orgánica de la Hacienda Pública y como órgano ejecutor la Contraloría General, Ley muy moderna para la época y que permitió, en cierta forma, adecentar la administración pública, es decir se modernizó la bodega.

Los funcionarios públicos buscaban diversos mecanismos para evadir la Ley y lograr ponerle la mano a algunos recursos del estado, llegó la época de las dictaduras e indudablemente el discurso era el bien administrar los recursos públicos y los castigos ejemplares que pudieran haber y bla, bla ,bla.

Sin embargo la corrupción campeaba e indudablemente la mano en las arcas las metían quienes tenían su bendición, de esa forma vimos muchos funcionarios de alto rango con un enriquecimiento desmesurado, incluyendo al mismo dictador que en su huida en la madrugada del 23 de enero dejó varias maletas abandonadas llenas de billetes verdes y quien tuvo una vida de opulencia en su “exilio” dorado sin que nunca se le pidiera cuenta de los bienes mal habidos y su reintegro a la nación para resarcir los daños ocasionados.

Después viene la larga lista de presidencias de la democracia donde varios Presidentes realmente vivieron en austeridad y fallecieron sin que se les conociera bienes de fortuna a ellos o su familia, (Ej: Rómulo Betancourt, Leoni, Caldera, Herrera Campins) sin embargo los funcionarios públicos de alto rango de sus épocas luego de pasar por esos ministerios más nunca se les vio ejerciendo sus profesiones o buscando trabajo, ya tenían para vivir su vida en una forma muy cómoda y con el agravante que en estos períodos se empezó a dar una nueva experiencia que es la corrupción aguas abajo.

Allí no sólo se corrompía el ministro sino que cada funcionario a su nivel se iba llevando los suministros de oficina, recibía dinero por favores realizados a los ciudadanos que requerían de sus servicios, en los tribunales en la época de los sesenta-setenta era muy común oír la frase: “El impulso procesar” no era más que el dinero entregado a la Secretaria del despacho para que le llegara al Juez y este pudiera tomar la “decisión acertada” o que aligerara el proceso que estaba llevando a cabo.

Chávez propició su golpe de estado en aras de denunciar la corrupción en la administración pública donde fueron denunciando la corrupción que existía en la época por los trabajos de reingeniería que le habían realizado a los tanques de guerra, los arreglos de los aviones de la aviación militar y toda esa crisis de valores que se había enquistado en el gobierno y que no permitía que los recursos del estado fueran invertir en forma correcta y para beneficio de los ciudadanos, en eso se basó su campaña, discurso que fue comprado por la mayoría del pueblo venezolano y le permitió por los votos y un sistema electoral que respetó los resultados llegar a la Presidencia.

Pero pareciera que fue “peor el remedio que la enfermedad”, en el año 2000 surgió el programa “Bolívar 2000” que coordinó un Teniente Coronel de apellido Weffer con poderes plenipotenciarios, en esos años se veían a militares en carros oficiales llegar a las ferreterías a comprar de todo en efectivo y que les dieran facturas con sobreprecio, no dejaban huellas, ese se llevó hasta las piedras de las obras, no se supo más nunca de él aunque fue enjuiciado, creo que ha sido uno de los pocos casos donde hubo un juicio por actos de corrupción.

Así llegamos al año 2020 donde ya no existe periódico, ni emisoras de radio, televisoras que se atrevan a denunciar la corrupción para no meterse en problemas con el gobierno, cuando es público y notorio como se ha incrementado la corrupción sin que exista ningún órgano que busque frenarla, historias van y vienen lo cual ha permitido ir documentando, verificando y validando las informaciones con el apoyo de organismos internacionales e investigadores nacionales, con precisión de dinero mal habido e incautado en el exterior, personas enjuiciadas en otros países por no poder justificar los recursos depositados en bancos.

Además de eso vemos como Venezuela progresivamente se ha venido deteriorando todos los servicios producto de esas prácticas, ejemplos sobran: El tercer puente sobre el Caroní, el segundo puente sobre el Lago de Maracaibo, el sistema eléctrico para el Zulia que estuvieran autoabasteciendo a la región, el sistema de ferrocarril nacional que no tiene ningún tramo en funcionamiento, excepto el Tuy Caracas, el deterioro de todo el sistema interconectado eléctrico.

Ya hoy los venezolanos podemos decir que no quedan recursos para continuar la corrupción y sin embargo se agota la gasolina, no hay como comprar en el exterior, las reservas del combustible están casi en cero y se decide, con el argumento del covid-19 suspender el suministro de gasolina y colocan a la GNB, PNB y en algunos casos a oficiales y militares del ejército a administrar las bombas de gasolina para despachar a las áreas prioritarias y se destapa la gran corrupción aguas abajo.

Las pimpinas de 20 litros de gasolina se empezaron a negociar a 20$ en forma pública y notoria, los carros que podían entrar a las bombas son los que cancelan 20$, los patrulleros sacando la gasolina a las unidades para negociarlas, eso con fotos, denuncias, reclamos en los mismos sitios, oficiales detenidos que al siguiente salen libres y de nuevo para el negocio, es decir el derrape total.

Nos tenemos que poner serios y denunciar la corrupción esté donde esté porque es lo que nos puede garantizar nuestra subsistencia en un país en quiebra.



No hay comentarios:

Publicar un comentario