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lunes, 11 de marzo de 2024

FORO HATILLANO #281 EL TOTALITARISMO: CONSIDERACIONES DESDE EL SIGLO XXI VENEZOLANO. Foro Chat Via Whatsapp. 11 de Marzo de 2024

 


EL TOTALITARISMO: CONSIDERACIONES DESDE EL SIGLO XXI VENEZOLANO


Resumen realizado por: Marielena Escalona Montesinos

 


 

Ponente: Daniel García Porras. Lic. en Teología (UCAB). 

Magíster en Filosofía Sistémica (Pontificia Universitá Gregoriana, Roma).

Magíster en Ciencias Políticas (Central European University, Viena) en curso.

 


Totalitarismo y su pertenencia en el contexto de la Revolución Bolivariana.


   Según autores como Hannah Arendt, Carl Friedrich, Brzezinsky y Juan Linz, el Totalitarismo es un fenómeno sin precedentes, único y moderno para cuyo desarrollo eran necesarias las condiciones materiales de la Revolución Industrial, la electricidad y nuevas tecnologías en los medios de comunicación de masas.

 

   Es un tipo de régimen político en el que el Estado busca ejercer un control absoluto y total sobre todos los aspectos de la vida pública y privada de los ciudadanos; este control se basa en una ideología oficial "totalista" y se ejerce a través de un partido único usando la represión, la propaganda y la manipulación de la información como herramientas para mantener el poder y suprimir cualquier forma de oposición o disidencia.

 

   El Totalitarismo se identifica con una tipología de 6 rasgos:

      .-Ideología Totalitaria que pretende explicar todos los aspectos de la realidad y demanda la conformación social de los ciudadanos; abarca todos los aspectos de la realidad material e incluso del sentido de la vida convirtiendo a este tipo de gobierno en una especie de religión política, pues da un carácter de explicación absoluta a la vida humana.

      .-Partido único: el poder está centralizado en un solo partido que dirige al Estado y a la sociedad.

      .-Represión como herramienta de control: uso sistemático del terror para suprimir a la población y controlar a la oposición.

      .-Control de los Medios de Comunicación, uso de la propaganda para adoctrinar y desinformar al público. Comunicación constante del líder con la población.

      .-Economía centralizada: control estatal de la economía para servir a los fines del partido y la ideología.

      .-Movilización de masas: en los primeros años del totalitarismo este tipo de movilización y culto al líder no son necesariamente forzadas aunque este aspecto se va perdiendo con el tiempo.

 

   El Totalitarismo se distingue de las otras formas de autoritarismo por su ambición de controlar completamente tanto la esfera pública como la privada, incluyendo el pensamiento y las emociones de los individuos, mientras que otros regímenes autoritarios pueden permitir cierto grado de autonomía personal o institucional sin traspasar la esfera privada y careciendo de una ideología tan detallada y de una movilización constante de la población. El Totalitarismo se caracteriza por su intención de moldear la sociedad en su totalidad conforme a una visión ideológica específica.

 

   Como toda definición, resulta está en una generalización útil para comprender este tipo de régimen. No obstante, hay aspectos particulares resaltados por cada autor que lo ha estudiado: Arendt resalta la comprensión de lo que implica la aniquilación de la vida pública y privada, pues afecta a la naturaleza misma del ser humano aislándolo de sus capacidades políticas y destruyendo también lo privado, con el resultado de un individuo superfluo y desarraigado. Para Friedrick y Brzezinsky la dictadura totalitaria es un sistema de gobierno para realizar intenciones totalistas bajo las condiciones políticas y técnicas modernas, como un nuevo tipo de autocracia; afirman que es importante considerar las condiciones subjetivas o intenciones totalistas e ideología al estudiar este tipo de gobierno. Por su parte, Juan Linz hace énfasis en la movilización de masas y culto al líder. El totalitarismo y en particular el fascismo necesitan de la movilización social y de la aclamación popular del líder.

 

Totalitarismo como una categoría política.


    Antes de los años 60 el término fue aceptado en la ciencia política norteamericana pero luego comenzó a ser cuestionado debido a los cambios sociales y políticos que estaban ocurriendo en aquellos momentos. En el contexto de la Guerra de Vietnam, la Revolución Cubana, los movimientos anticolonialistas, el respaldo de Estados Unidos a dictaduras en algunos países, se empezó a criticar el concepto de totalitarismo pues había sido creado por los Estados Unidos para etiquetar a todos sus enemigos, considerando que era un término muy reduccionista, limitado a la lucha anticomunista, y que fue hecho a la medida para justificar la política exterior norteamericana; y algunos personajes influyentes de Estados Unidos se hicieron eco de esta apreciación.

 

   Para el estudioso Max Horkheimer de la Escuela de Frankfurt, se mantiene vigente el concepto de totalitarismo asumiéndolo como un problema propio de la racionalidad tecnicista moderna. Igualmente, otros estudiosos alemanes de la época consideraron al totalitarismo como un fenómeno propio de la modernidad y que tiene sus raíces en la racionalidad moderna, además una postura crítica a la Democracia Liberal Representativa porque en ella se podían "colar" fácilmente los enemigos del sistema para destruirlo desde adentro sin que existieran mecanismos para evitarlo sin alterar los principios del pluralismo y la pluralidad de valores.

 

   Para la época de la desintegración de la Unión Soviética en los años 90 hasta la actualidad, el término Totalitarismo es relegado por considerarlo sin vigencia para describir las complejidades y sutilezas de los regímenes contemporáneos, en especial los retrocesos democráticos de las últimas décadas que parecen mezclar rasgos democráticos con rasgos autoritarios, lo que se conoce como Regímenes Híbridos (autoritarismo hegemónico, autoritarismo competitivo, etc).

 

   Para reconsiderar el concepto de Totalitarismo, Daniel García propone remontarse a sus orígenes en la Italia de los años 20. Este concepto va más allá de la mera descripción de regímenes políticos específicos; tiene que ver con la esencia misma de la Voluntad de Poder y de la Dinámica Política. Haciendo una evaluación crítica de la naturaleza totalista del fascismo plasmado en el proyecto político, las aspiraciones de Mussolini, su discurso y su ideología, se puso de manifiesto su naturaleza totalitaria. Esta crítica pretendía alertar a la población y a la disidencia de la oposición antifascista del talante del novedoso régimen ante el cual se estaban enfrentando, más allá de lo electoral y lo parlamentario.

 

    Este tipo de régimen no se conforma con tener la mayoría del poder, siempre están cambiando para sostener y mantener la voluntad de poder totalitario.

 

   Una definición más amplia de Totalitarismo debe integrar la dimensión ideológica del mismo, la voluntad totalitaria que obedece a la Psicología de la práctica de los actores políticos; hay que incluir además la dinámica del poder que está cambiando constantemente y aun así sostiene la voluntad totalitaria con cambio en las tácticas y la estrategia es el sostenimiento del sistema.

 

Relación entre el Estado Totalitario y el Estado Fallido.


   Según Franz Neumann, también de la Escuela de Frankfurt, el nacionalsocialismo tenía una característica particular en su práctica y en su estructura y lo consideró como una "amalgama caótica" de poderes incompetentes, un estado de desorden y anarquía. Según este autor, el estado nazi no operaba dentro de los confines del Estado de Derecho si no que sistemáticamente trasgredía los principios legales, institucionalizando y normalizando prácticas criminales (Holocausto) respaldado por un aparato estatal desprovisto de restricciones legales y éticas tradicionales. Al violar sus propias leyes vigentes se convirtió en un Estado Delincuencial.

 

   La potencia del Estado Totalitario, paradójicamente, se fundamenta en el caos y la destrucción, lo que implica una negación de las condiciones de la vida política. El nazismo terminó siendo una negación de la política.

 

   El terror totalitario, con su violencia estatal masiva, evidencia que el régimen opera contra el Estado aunque ejerce su poder desde el Estado. El Totalitarismo usa los elementos de la modernidad para alcanzar sus potencialidades destructivas, vaticinando la aparición del Estado Criminal, donde la racionalidad instrumental y las instituciones del Estado son capturadas en beneficio del régimen y de los grupos criminales que se aprovechan del debilitamiento institucional, convirtiendo al Estado en una institución estructuralmente delincuencial.

 

   Este análisis de Neumann fue un anuncio de las dinámicas políticas de las transiciones post soviéticas. La caída de la Unión Soviética dejó un Estado débil, susceptible de ser capturado por intereses particulares. A su vez, las antiguas élites comunistas que acumulaban un poder real, se reacomodaron frente a la nueva situación ya sea como corruptos oligarcas capitalistas, bandas de crimen organizado o manteniéndose dentro de la estructura del Estado. Además, el crimen organizado ha desempeñado un papel muy significativo en las transiciones de los países de Europa oriental, aprovechando la debilidad de las instituciones estatales para expandir su influencia. En algunos casos estas organizaciones han llegado a reemplazar funciones tradicionales del Estado.

 

   Si el Totalitarismo da pie al Estado Criminal, también abre el cauce para otra forma paradójica que es el Estado Fallido, que es un Estado que ha perdido la capacidad de ejercer su autoridad institucional sobre todo su territorio, y es incapaz de proveer servicios básicos a sus ciudadanos.

 

   Al hacer un paralelismo con la realidad venezolana, Daniel García afirma que si se entiende el concepto de Totalitarismo como una tipología o modelo que caracteriza las expresiones materiales y externas de un tipo de régimen político, ciertamente el concepto no tiene vigencia en el mundo contemporáneo, a excepción del régimen de Corea del Norte, pero al reconsiderar el concepto volviendo a sus orígenes podemos tener una concepción más amplia y que tiene vigencia en "contextos revolucionarios" en lo ideológico y lo discursivo.

 


La importancia del tema explica la nutrida participación de 263 ciudadanos a través de un chat de WhatsApp, en esta Edición No. 281 del Foro Hatillano.

 


Enlace para ver la presentación:

https://drive.google.com/drive/folders/1-qv79_JayEdHiVfhTEy0GpJVZ50RIQjH?usp=sharing



EL FORO HATILLANO NO SE HACE RESPONSABLE POR LAS OPINIONES EMITIDAS POR EL PONENTE.

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