En las Parroquias del Norte, Altagracia y San José, colindantes con la Cota Mil y el Parque Nacional El Ávila, en los túneles que comunicarán con la Autopista Caracas La Guaira, una de las decenas de obras abandonadas por falta de recursos que dejó el gobierno nacional, los vecinos descubrieron que dentro de ellos se forman lagunas con el agua, proveniente del Ávila, que sale de las paredes.
Debido a que tienen más de 4 años que no reciben agua por tuberías de parte de Hidrocapital y utilizando un sistema de mangueras, han establecido su propio acueducto, improvisado pero funcional, que conduce el agua desde los túneles hasta los sectores: El Cardón, El Retiro, Los Cujicitos, Urb. Caraballo, escalera San Judas, escalera San Marcos, 3ra Calle Los Pinos y Calle Carabobo de las Parroquias Altagracia y San José.
El agua es cruda, sin ningún tratamiento, tampoco conocen su calidad, ni tampoco si es adecuada para consumo humano. Según le informaron al Monitor de Radar Ciudad de la zona, la utilizan para limpieza, lavado de ropa y baños, aportando una solución a la escasez absoluta de agua.
A esta situación impactante le damos dos lecturas, la primera es la capacidad de la gente de buscar soluciones a los problemas que sufren, buscando recursos, construyendo e instalando lo necesario para lograr su objetivo, que en este caso es el suministro parcial de agua. La segunda lectura es la incapacidad, la ineficiencia y la irresponsabilidad de los Directivos de Hidrocapital de NO atender las necesidades de cientos de familias que no reciben agua.
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